BIOGRAFÍA
Takeo Kanade (Tamba, Hyogo, Japón, 1945) se doctoró en Ingeniería Eléctrica en la Universidad de Kyoto (Japón) en 1974, donde ejerció la docencia durante los años siguientes para, en 1980, incorporarse a la Universidad Carnegie Mellon (Estados Unidos), donde en la actualidad es Founders University Professor de Informática y Robótica. Allí ha permanecido el resto de su carrera y hoy es titular de la cátedra U. A. y Helen Whitaker de Informática y Robótica. En Carnegie Mellon ha sido director del Instituto de Robótica (1992-2001) y creador del Centro de Tecnología para la Calidad de Vida, que dirigió entre 2006 y 2012. También ha sido director-fundador del Digital Human Research Center, en Tokyo, una iniciativa del Instituto Nacional de Ciencia y Tecnología Industrial de Japón. Titular de más de 20 patentes, ha sido asesor de la NASA o el Instituto Canadiense de Investigación Avanzada. Fue editor jefe fundador del International Journal of Computer Vision; y forma o ha formado parte de los consejos de publicaciones como Medical Image Analysis, International Journal of Robotics Research y Robotics and Autonomous Systems.
CONTRIBUCIÓN
Kanade revolucionó el campo de la visión artificial en tres dimensiones, al desarrollar algoritmos mucho más rápidos que los que existían hasta entonces y posibilitando por tanto un gran número de aplicaciones prácticas. Junto con su doctorando Bruce Lucas, en 1981 desarrolló un nuevo método para estimar el movimiento de los objetos en las imágenes grabadas por varias cámaras simultáneamente y así poder integrarlas de manera eficiente, algo fundamental para obtener vídeos en tres dimensiones. Hoy en día, su algoritmo se usa para prácticamente cualquier técnica de compresión de datos de imágenes en movimiento. Además, en colaboración con otro doctorando suyo, Carlo Tomasi, en 1992 desarrolló una manera de simplificar drásticamente los cálculos que debe realizar un ordenador para procesar imágenes tridimensionales. Su contribución hizo factible que los ordenadores de la época trabajaran con este tipo de imágenes.
Las técnicas que propuso Kanade están presentes hoy en los coches y helicópteros autónomos, los drones y todos los robots que incorporan capacidad de visión. Además, en 2001 la emisión televisiva de mayor audiencia en Estados Unidos, la final de la Super Bowl, presentó un avance técnico que permitía la recreación en 360 grados de una escena. Este hito sentó las bases de la “realidad virtualizada”, que permite reconstruir puntos de vista de una escena independientemente de los ángulos donde estén situadas las cámaras, y cambió para siempre la forma de retransmitir el deporte al permitir, por ejemplo, ver un partido de fútbol desde el punto de vista del balón o emplear el ojo de halcón en un partido de tenis.
La visión artificial también se ha convertido en una tecnología clave en la cirugía robótica, un campo que se ha expandido en buena medida gracias a las técnicas desarrolladas por Kanade. El propio Kanade desarrolló junto con su equipo el primer sistema robotizado para la cirugía de prótesis de cadera, que logró una precisión mucho mayor en la colocación de la prótesis mediante un procedimiento menos invasivo que el tradicional.