NOTICIA PREMIOS FRONTERAS DEL CONOCIMIENTO

Martin Ravallion, Premio Fronteras del Conocimiento de Cooperación al Desarrollo

El Premio Fundación BBVA Fronteras del Conocimiento en la categoría de Cooperación al Desarrollo ha recaído en su octava edición en el economista australiano Martin Ravallion, pionero en la medición de la pobreza con indicadores aplicables internacionalmente. En 1991, fue el primer firmante de un artículo que fijó en un dólar diario el umbral de pobreza extrema por debajo del cual la supervivencia no era posible. Ese umbral de pobreza ha sido asumido universalmente, “porque nada por debajo de eso podría ser razonable para sobrevivir. Si buscamos un estándar global debemos concentrarnos en el mínimo de los países más pobres”, ha explicado el propio Ravallion al conocer la concesión del premio.

23 febrero, 2016

Perfil

Martin Ravallion

Rueda de prensa

Cambio climático y pobreza: retos globales cada vez más interrelacionados

Para destacar la importancia de la contribución de Ravallion, el jurado recordaba ayer la frase de Lord Kelvin: “Lo que no se mide no puede ser mejorado”. Y señalaba que antes se hablaba de pobreza en términos abstractos o subjetivos, “e incluso había cierta reticencia a pensar que pudiera medirse objetivamente, pero gracias al trabajo del galardonado ha sido posible diseñar políticas públicas de lucha contra la pobreza extrema con metas más claras, incluida la de su eliminación”.

Los Objetivos del Milenio, o los más recientes Objetivos para el Desarrollo Sostenible, han podido apoyarse en esos indicadores para fijarse una de sus metas, eliminar la pobreza extrema en 2030, un objetivo sobre el que Ravallion es optimista: “Estamos de hecho en el camino correcto”, afirmó ayer, “considerando los importantes avances logrados en esa dirección por muchos países en desarrollo en las últimas décadas”. Sin embargo, añadió que en este trayecto hay amenazas: el cambio climático, la recesión global y el aumento de la desigualdad.

“La desigualdad puede impedir sacar de la pobreza a mil millones de personas en los próximos 15 años”.

TUITEAR

En este sentido advirtió de que aunque la pobreza extrema puede reducirse al tiempo que aumenta la desigualdad, a la larga, “la desigualdad puede impedir sacar de la pobreza a mil millones de personas en los próximos 15 años”. Cuando Ravallion llegó en 1988 al Banco Mundial eran escasos los economistas que trabajaban en la medición de la pobreza, pero se unió a un grupo profundamente interesado en estos temas. Su línea de investigación tiene raíces en su propio origen.

Nacido en Australia en 1952 en una familia muy humilde recuerda haber recibido ayudas sociales, por lo que tomó una determinación: “No quería ser pobre”. Tras estudiar en la Universidad de Sidney, en 1981 Martin Ravallion se doctoró en Economía en la London School of Economics (donde además ejerció la docencia). Continuó su carrera investigadora en la Universidad de Oxford y la Universidad Nacional Australiana, hasta que en 1988 se trasladó a Washington, donde comenzó a trabajar como economista en el Banco Mundial.

Para entonces ya se había dado cuenta de que las condiciones de vida de una infancia humilde en Australia, como la suya, no eran comparables a las de las personas que vivían en la pobreza en la India. De ahí la importancia de establecer criterios precisos para valorar comparativamente las situaciones de pobreza en distintos países. Sus contribuciones seminales a la investigación sobre el desarrollo, particularmente la pobreza y las políticas para eliminarla, le llevaron a ser director del Grupo de Investigación del Desarrollo del Banco Mundial. Allí, sus ideas y métodos fueron a su vez enriquecidos por su interacción con muchos investigadores con objetivos comunes. Su trabajo sirvió para que cientos de economistas e investigadores, dentro y fuera del Banco Mundial, se sumaran a la tarea de cuantificar y entender la pobreza, sus causas y sus soluciones en los países del mundo.

En 2008, Ravallion, ya director de Grupo de Investigación del Desarrollo del Banco Mundial, fue coautor del informe en el que se estimaba que en 25 años las personas que vivían en pobreza extrema en el mundo habían disminuido de los 1.900 millones (uno de cada dos) en 1981 a 1.400 millones (uno de cada cuatro) en 2005. En ese momento, el umbral de pobreza se situaba en 1,25 dólares/día. La última medición, de 2012, estima que ese umbral se sitúa en 1,90 dólares/día. La contribución de Ravallion es también esencial por su análisis de la relación entre el crecimiento económico y la pobreza.

A partir de observaciones económicas en diversos países demostró que el crecimiento es condición necesaria para reducir la pobreza, aunque no siempre resulta suficiente, especialmente en contextos de alta desigualdad de ingresos y de acceso a servicios públicos como la educación y la salud. En tales casos, la acción complementaria de las políticas políticas sociales es imprescindible. Sus investigaciones en China e India le llevaron a concluir que mejorar el sector agrícola es clave para actuar sobre la pobreza extrema, ya que su impacto positivo es grande e inmediato en países en los que la mayoría de la población depende del sector primario y vive en zonas rurales. La importancia de la productividad de la agricultura se ha confirmado en otras latitudes, debiendo tenerse presente que más del 70 por ciento de la población del mundo sigue viviendo en zonas rurales.

Ravallion ha observado también la “urbanización” de la pobreza y ha criticado políticas que por un lado restringen la agricultura y por otro son hostiles a los migrantes procedentes de zonas rurales. Tras dejar el Banco Mundial, desde 2013 Martin Ravallion es titular de la cátedra de Economía Edmond D. Villani en la Universidad de Georgetown. Ha asesorado a numerosos gobiernos y agencias internacionales sobre la pobreza y las políticas para luchar contra ella. Es autor de más de 200 trabajos en revistas especializadas y cinco libros.

En enero de este mismo año acaba de publicar el último: ‘The Economics of Poverty: History, Measurement and Policy’, editado por Oxford University Press.

Jurado internacional

El jurado de esta categoría está presidido por Clara Menéndez, directora de la Iniciativa de Salud Materna, Infantil y Reproductiva, y profesora de investigación en el Instituto de Salud Global de Barcelona (ISGlobal) (España), y cuenta como secretario con Norman Loayza, Lead Economist en el Grupo de Investigación del Desarrollo –equivalente al Departamento de Investigación– del Banco Mundial en Washington (Estados Unidos).

El resto de los miembros son Antonio Ciccone, catedrático del Departamento de Economía de la Universidad de Mannheim (Alemania); José García Montalvo, catedrático de Economía en la Universitat Pompeu Fabra, (Barcelona) y profesor investigador del Instituto Valenciano de Investigaciones Económicas (IVIE) (España); Vicente Larraga, profesor de investigación del Centro de Investigaciones Biológicas del Consejo Superior de Investigaciones Científicas (CSIC) (España); Francisco Pérez, director de investigación del Instituto Valenciano de Investigaciones Económicas (IVIE) y catedrático de Fundamentos del Análisis Económico de la Universitat de València (España) y Antonio Plasència, director general del Instituto de Salud Global de Barcelona (ISGLobal) (España).